heraldo.es 29.10.20

Desde el mismo instante de su nacimiento, un individuo tiene reconocida su capacidad jurídica. Es decir, posee la aptitud para ser titular de derechos subjetivos y deberes jurídicos. En cambio, no todo el mundo posee la capacidad de obrar, que permite ejercer los derechos que poseen y que dependerá de la situación personal de cada uno.

Conscientes de lo complicado que puede resultar entender este concepto y sus usos dentro del colectivo de personas con discapacidad intelectual, Plena inclusión Aragón, una de las ocho entidades aragonesas que este año han recibido el apoyo de la Fundación ‘la Caixa’ para desarrollar proyectos sociales a la atención al envejecimiento, la discapacidad y la enfermedad, puso en marcha en junio de este año el proyecto ‘Mejorando la comprensión en el proceso de modificación de la capacidad de obrar en Aragón’.

"Es fundamental mejorar el entendimiento de este colectivo de personas con respecto al ámbito jurídico, ya que esto supone garantizar el cumplimiento de sus derechos básicos y fundamentales, como ocurre en el caso del derecho a la información y participación de toda la ciudadanía. Cuando entienden este tipo de procedimientos, pueden familiarizarse con ellos y son capaz de afrontarlos de manera autónoma", explica Santiago Aguado, coordinador del proyecto ‘Creando Espacios Accesibles’ de Plena inclusión.

Entre otras actuaciones, están adaptando a lectura fácil las cédulas de emplazamiento y sentencias del proceso de modificación de la capacidad de obrar de 30 personas con discapacidad intelectual de Aragón. Además, están valorando la accesibilidad cognitiva de los tres principales juzgados donde se realiza este proceso jurídico en Zaragoza, Huesca y Teruel. Y realizan tareas de formación y sensibilización ‘on-line’ a operadores jurídicos de Aragón (abogados, jueces, magistrados, tutores,) sobre la discapacidad intelectual, las necesidades cognitivas y las dificultades que tiene este colectivo en el acceso a trámites del ámbito jurídico.